La provincia de Huesca es una joya desconocida de Aragón. Un destino que ofrece una gran diversidad y una belleza natural que cautiva a turistas de todo tipo. Desde majestuosos paisajes de montaña hasta encantadores pueblos medievales, en esta guía vamos a tratar de conocer qué ver en Huesca provincia.
Queremos mostrarte cuáles son los lugares que debes visitar de manera imprescindible. Hablaremos, por ejemplo, de magníficos parques naturales, tesoros históricos y culturales y pueblos pintorescos que hacen de Huesca un lugar único. Una provincia llena de maravillas por descubrir y que te animarán a volver una y otra vez.
Top-5 imprescindibles que ver en Huesca provincia
Si quieres disfrutar de hermosos paisajes naturales, pasear por callejuelas medievales y sumergirte en el vibrante pasado histórico y cultural de la provincia de Huesca, debes incluir en tu ruta estos cinco destinos y rincones imprescindibles.
Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido
Situado en el Pirineo Aragonés, el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido es uno de los parques naturales más antiguos y bellos de nuestro país. Un paraíso que destaca por su biodiversidad y por sus impresionantes paisajes. De visita imprescindible son la Cola de Caballo, una espectacular cascada de 54 metros de altura, y el Cañón de Añisclo, un profundo valle de más de 10 kilómetros.
Por todo el parque, hay un sinfín de rutas de senderismo que puedes realizar. La Senda de los Cazadores en Torla está considerada, precisamente, una de las más impresionantes del parque. También puedes disfrutar de la Faja de las Flores, una ruta desde la que contemplar unas magníficas panorámicas del valle de Ordesa.
La mejor época para visitar el parque natural es entre los meses de junio y octubre. Durante esta época, la climatología suele acompañar y los caminos están más accesibles para todos. Te recomendamos llevar calzado adecuado, agua y un poco de ropa de abrigo para la mañana o la tarde, ya que refresca un poco.
A todos los visitantes se les recuerda la necesidad de seguir las normas de conservación para preservar el entorno: no dejar basura, respetar la fauna y la flora local, etc.
Catedral de Huesca
La Catedral de Huesca es, sin duda, uno de los monumentos imprescindibles que ver en Huesca capital. Construida entre los siglos XIII y XVI sobre los restos de una antigua mezquita, es una obra de estilo gótico con influencias renacentistas. Su fachada principal, con el imponente rosetón, nos invita a descubrir su interior.
Una vez dentro, sorprende la amplia y luminosa nave central. El conjunto está sostenido por un conjunto de elegantes columnas y arcos apuntados. Una de las piezas más destacadas es el retablo gótico del altar mayor, obra de Damián Forment. A ambos lados de la nave central pueden verse una serie de capillas, algunas de ellas con piezas de indudable valor.
- Horarios de visita: de lunes a sábado de 09.00 a 13.30 y de 16.30 a 18.30 horas (domingos y festivos de 09.00 a 13.00 y de 16.30 a 18.30 horas).
- Precios: entrada general 6 euros (4 euros para mayores de 65 años, familia numerosa, desempleados, carné joven hasta 24 años; gratis para los menores de 12 años).
Castillo de Loarre
El Castillo de Loarre es toda una joya del románico español. Construido en el siglo XI por orden del rey Sancho III el Mayor, sirvió como bastión defensivo frente a los musulmanes. Esta fortaleza, conocida por su robusta y majestuosa arquitectura, está considerada el castillo románico mejor conservado de Europa.
El complejo incluye varias torres, destacando especialmente la Torre Albarrana. Además, desde sus murallas se aprecia una impresionante vista panorámica. Junto al castillo, también se puede visitar la iglesia de San Pedro, uno de los rincones más ocultos de este emblema del patrimonio histórico de Aragón.
- Horario de apertura: de lunes a domingo de 10.00 a 19.00 horas (otoño y primavera), hasta las 20.00 horas (verano) y hasta las 17.30 horas (invierno).
- Precios: 6 euros la entrada general (5.50 euros estudiantes y carnet joven para menores de 26 años, grupos de más de 20 personas y jubilados; 4.50 euros para niños de 6 a 16 años; gratis para menores de 6 años).
- Visitas guiadas: se realizan en grupos de 40 personas como máximo con una duración de 1 hora. La reserva puede hacerse online y tiene un precio de 8 euros.
- Cómo llegar: desde Huesca, tomar las carreteras A-132 y la A-1206 (30 minutos en coche).
Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara
Los amantes de los paisajes de montaña tienen una visita imprescindible en el Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara. Un lugar con una enorme biodiversidad, ya que en este espacio viven especies como el quebrantahuesos, el buitre leonado y una gran variedad de flora de la zona.
El parque es un auténtico paraíso para los seguidores del barranquismo. No en vano, hay cañones muy populares, tales como el Barranco de Mascún o el Cañón del río Vero. También se puede realizar senderismo a través de rutas como la del Salto de Roldán o la que llega hasta el Tozal de Guara. En los meses de primavera y otoño, los turistas pueden disfrutar de la contemplación de aves.
Para disfrutar del parque, te recomendamos llevar el equipo adecuado (calzado de montaña, ropa cómoda y un impermeable). No te olvides de seguir las rutas marcadas y cumplir con todas las normas que garantizan una experiencia más segura y gratificante.
Valle de Tena
En el corazón del Pirineo Aragonés, aparece el Valle de Tena. Este paraíso natural es el hogar de pueblos tan pintorescos como Panticosa o Sallent de Gállego, conocidos por su encanto y por sus paisajes. En los meses de invierno, el valle se convierte en un destino ideal para los amantes del esquí, gracias a sus estaciones de Formigal y Panticosa.
En verano, en cambio, la actividad más habitual es el senderismo. A lo largo de todo el valle, hay rutas que atraviesan impresionantes paisajes y permiten descubrir praderas, lagos y glaciares.
La mejor época para visitar el Valle de Tena va a depender por tanto de la actividad que quieras efectuar. De diciembre a abril, las nevadas son ideales para el esquí y otros deportes de invierno. De junio a octubre, por su parte, el clima es más suave y los días más largos, por lo que son ideales para el senderismo y para disfrutar de la naturaleza en todo su esplendor.
Consejos prácticos para visitar Huesca provincia
- Transporte
Huesca está perfectamente comunicada por autovía con Zaragoza, Barcelona, Pamplona, Lleida o Valencia. De hecho, hay autobuses desde Zaragoza, Lleida y Barcelona que comunican con Huesca a diario. También es posible llegar en tren, sobre todo desde Zaragoza o Madrid (trayecto de poco más de 2 horas y media).
A solo 10 kilómetros de Huesca capital se encuentra el Aeropuerto Huesca Pirineos. Aunque la mejor opción para llegar en avión es ir hasta el aeropuerto de Zaragoza.
La mejor forma de moverse por la provincia de Huesca es alquilando un coche. Puedes utilizar los autobuses de transporte público, pero los horarios de paso no son muy frecuentes.
- Alojamiento
A la hora de buscar alojamiento para disfrutar de Huesca y su provincia, nada mejor que optar por el Hotel Monasterio Boltaña. Este establecimiento – spa de 5 estrellas se encuentra a los pies del Parque Nacional de Ordesa. Ubicado en un viejo monasterio del siglo XVII, sus modernas instalaciones te permitirán disfrutar de una estancia única. Lujo, tranquilidad y sofisticación para que tu experiencia en Huesca sea inolvidable.
- Gastronomía
Para finalizar, antes de irte de Huesca y su provincia, debes degustar alguno de sus platos típicos y más tradicionales. Los espárragos montañeses, los boliches de Embún o el recao de Binéfar son algunos de los imprescindibles. Lo mismo podemos decir de la longaniza de Graus, el arbiello o las farinetas de Aragón. La torta de Arbeye, el coc de Fraga o los crespillos de Borrajas son los postres que deberías probar.